La gigantoplastia de reducción es un procedimiento quirúrgico indicado en pacientes con hipertrofia mamaria, es decir, cuando el tamaño excesivo de las mamas genera molestias físicas, posturales, dolores de espalda o dificultades en la vida cotidiana. Tradicionalmente, la cirugía busca reducir el volumen mamario y mejorar la forma, priorizando tanto la salud como la armonía estética del cuerpo.
Hoy en día, existen técnicas avanzadas que permiten no solo reducir, sino también moldear y proyectar la mama, logrando resultados más naturales y duraderos. Entre ellas se encuentra la gigantoplastia de reducción con implante y autoimplante.
- Implante mamario: se utiliza en casos donde, al retirar el exceso de tejido, puede perderse proyección o plenitud en el polo superior del busto. El implante ayuda a mantener un contorno armónico y firme.
- Autoimplante: consiste en aprovechar el propio tejido de la paciente —que de otra manera sería retirado— para reubicarlo estratégicamente dentro de la mama, brindando volumen y forma sin depender exclusivamente de prótesis.
Este enfoque combinado permite conservar la naturalidad del resultado, equilibrar la reducción con una adecuada proyección y ofrecer mayor comodidad a las pacientes.
La gigantoplastia de reducción con implante y autoimplante no solo transforma la estética corporal, sino que también mejora la calidad de vida, aliviando síntomas físicos y elevando la autoestima. Como toda cirugía, debe ser realizada en una clínica habilitada, por un equipo médico especializado y tras una valoración individual que determine la técnica más adecuada para cada caso.