Cirugía plástica y lactancia materna: mitos y recomendaciones de expertos

La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que la lactancia materna es una de las mejores formas de garantizar la salud y la supervivencia del niño.
Del 1 al 7 de agosto, la OMS en colaboración con UNICEF celebra la Semana Mundial de la Lactancia, este año bajo el lema “Cerrar la brecha: apoyo a la lactancia materna para todos”.
El doctor Nicolás Maestro Sarrión, presidente de la Asociación de Cirugía Estética Plástica (AECEP), explica que las prótesis de aumento de pecho pueden colocarse delante o detrás del músculo pectoral, pero siempre van debajo de la glándula mamaria.
Toda operación supone un riesgo, evidentemente, pero estos riesgos son independientes de la lactancia. Lo máximo que puede pasar en relación a la lactancia es que algunas mujeres pueden tener casos de mastitis, pero esto no esta relacionado con las prótesis”.
Nicolás Maestro Sarrión
Por otro lado, el doctor José Luis Vila señala que, aunque el aumento de pecho no impide la lactancia, sí puede haber alguna lesión en el nervio intercostal en la cirugía, lo que puede afectar a la sensibilidad del pezón.
Además, el tamaño de la prótesis también puede influir, pues cuanto mayor sea la prótesis mas espacio hay que hacer y más zona hay que afectar.
El cirujano insiste en que esa sensibilidad se recupera con el tiempo y no ocasiona ningún problema en la lactancia.
Por otro lado, Cristina Franco, matrona, indica que la lactancia con implantes depende mucho de la técnica empleada.
Si la prótesis se encuentra por detrás del músculo pectoral tiene una menor influencia que si está justo por debajo de la glándula mamaria.

Sin embargo, apunta que lo que más puede afectar a la lactancia materna en el caso de las mujeres con un aumento de pecho es la localización de la cicatriz generada por la técnica utilizada.
Esta técnica puede llegar a afectar al cuarto nervio intercostal, que es el que inerva la glándula mamaria y una parte muy relevante para la producción de leche.
La sensibilidad es fundamental
La matrona Cristina Franco explica que, una cuestión muy relevante para la producción de leche, es una adecuada sensibilidad en la zona de la aureola y muchas mujeres cuando se someten a un aumento de las mamas notan una disminución de la sensibilidad en esa zona.
Esta pérdida de sensibilidad puede afectar a la producción de prolactina y oxitocina, hormonas cruciales para la lactancia y que se estimulan mediante la estimulación de la areola y el pezón.
La incisión por la aureola deja una pequeña cicatriz pero que en principio no tiene repercusión ninguna, ni causa problema en la lactancia”.
El cirujano Nicolás Maestro Sarrión.
Por lo tanto, aquellas mujeres que pierden sensibilidad tienen una menor capacidad de producción o esta puede verse afectada.
Señales de alerta
La matrona explica que uno de los síntomas que se deben tener en cuenta para saber si algo va mal es la escasa producción de leche.
En estos casos, se debe valorar la técnica de lactancia, la posición y la frecuencia con la que el bebé se coloca el pecho.
El hecho de que el bebé no gane el peso adecuadamente también puede ser una señal de alerta.
Por otro lado, la experta apunta que en algunas ocasiones se pueden encontrar conductos obstruidos, posiblemente debido a un corte en algunos de los conductos durante la operación de aumento de pecho.
Apoyos específicos
La especialista indica que en casos concretos, como por ejemplo, que una mujer se haya realizado una operación de aumento de pecho porque tenía una mama hipoplásica (que no se ha desarrollado completamente) necesitará un apoyo adicional.
Probablemente, requerirá más frecuencia en el número de extracciones o en el número de veces que pone al niño al pecho.
Sin embargo, la experta señala que habrá muchas mujeres que se hayan sometido a un aumento de pecho y que no requieran de ningún apoyo especial, a parte del apoyo que necesita cualquier mujer recién dada a luz y que quiere dar el pecho.
La matrona explica que lo que sí es importante, es que, durante el proceso del embarazo, cuando una mujer es atendida por su matrona y manifiesta su deseo de lactar, si la mujer se ha sometido a un aumento de pecho, se debe investigar como era la anatomía de sus mamas antes de la cirugía
Los mitos
Se afirma que el principal mito es que las mujeres creen que con los implantes no se pueden quedar embarazadas ni tampoco amamantar, sin embargo, se explica que obviamente el pecho va a cambiar por la lactancia y por el embarazo, independientemente de la cirugía de aumento de mama.
Por su parte, el doctor Vila presidente de la SECPRE está de acuerdo en que el principal mito es que no se puede amamantar con el pecho operado.
Un aumento de pecho no tiene porqué interferir en la lactancia materna, aunque en ocasiones puede haber algún inconveniente relacionado con la sensibilidad.
Además, incide en que otro bulo es que las silicona de las prótesis va a pasar a través de la leche del bebe.
En este caso, la matrona Cristina Franco refuerza el testimonio del cirujano, pues indica que muchas madres creen que cuando se han puesto implantes mamario es imposible lactar, o incluso que el simple hecho de la lactancia va a afectar a la estética del pecho.
Recomendaciones
En general, los consejos que ofrece la matrona son que las mujeres eviten aquellas técnicas que tienen más riesgo de afectar a la inervación y hablar claramente con los cirujanos.
Tomado de: https://www.eluniversal.com.co